Con la que tienen encima, y la que les espera... los gregorianos han vuelto a tirar por la calle de en medio y más socorrida. Ya tienen vocero oficial para
su privatizada declamación de la fiesta religiosa más importante de todos los sevillanos.
Como ya ocurriese con la
designación del cartelista, de la chistera salió un nuevo conejo que ya fue expuesto en los mentideros cofrades.
El ex Hermano Mayor del Baratillo, un hombre del
typical establishment cofradrish (permítase la licencia anglosajona del palabro) que reúne el perfil del agrado de la grey pastoral, cumple con el estereotipo de más común denominador entre los pregoneros: abogado, haber portado de varad dorada, católico practicante -no sólo de cultos con pompa y boato- y buen orador, es la apuesta menos controvertida que manejaban. Ignacio Pérez Franco es el elegido tras dos rondas de votaciones en las que el peso fuerte de las penitencias vuelve a torcer.
Mientras el aforo del Maestranza siga estando privatizado, el Pregón con su pan se lo coman.
Llévate las entradas.
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