La gran hecatombe no podía tener otro final más que el previsible. Desde que Regla entró, los peores augurios vaticinados se han cumplido. El Sol, espera un claro para volver al Plantinar con un cortejo diezmado, y las dos últimas del día tampoco salen.
¿ Y el Resucitado? Esa es otra historia que a ésta hora no podemos contar.
Llévate las entradas. Tweet
Marzo de plata
-
Hoy se tiñe de morado una esquina de la ciudad, la que traza en las calles
de la infancia el kilómetro cero de los días de reencuentro con la propia
verdad...
Hace 8 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario