La Virgen en casa: La Esperanza de Triana por Antillano Campos

Mercedes Ruiz Gutierrez, agüela de Triana, junto a su hija, autora de ésta carta, en el Besamanos de la Esperanza en 2006. Entre ambas suman más de 120 años como Hermanas de corporación trianera. Foto Manuel Ruiz Leal.

De cal a cal en los muros de nuestros recuerdos,calle Antillano Campos , el palio justo,deteniendo el tiempo entre las bambalinas. Amanece en el barrio , Triana arropando a la Señora de Pureza, y una de sus abuelas, toda la noche en vela esperando a la Esperanza.

Tras las emociones vividas, quiero ser bien nacida y dar muchas gracias por lo acontecido en mi casa con motivo de la celebración del XXV Aniversario de la Coronación Pontificia de Nuestra Madre y Señora de la Esperanza de Triana.

Gracias a Dios, por haber concedido a mi madre, trianera de nacimiento y convencimiento y hermana de la hermandad desde que siendo jovencita la apuntara Joselito Ruiz Flores, llegar a esta edad, 91 años, para poder disfrutar de ver a su Virgen pasar por su calle de Antillano Campos y tenerla parada delante de su balcón, algo seguramente irrepetible al menos para ella, más aún cuando en Noviembre del año 2000 con ocasión de la salida extraordinaria por la celebración del L Aniversario del Dogma de la Asunción, estando anunciado el recorrido de la Virgen por nuestra calle, por las inclemencias meteorológicas hubo de acelerar la vuelta a su capilla cogiendo un camino más corto, dejándonos a tantos, pero sobre todo a una persona tan mayor con ese vacío, y todavía más porque seguro que jamás pensaría que al cabo de casi diez años iba a ver realizada esa ilusión y a disfrutar a su edad con tanta emoción por la visita que la Virgen le ha hecho.

Gracias a toda la Junta de Gobierno por haber elegido este itinerario, que dicho sea, ha resultado precioso; gracias al capataz por la levantá que hizo en nuestra casa en honor de “toas las agüelas de Triana”; gracias a los extraordinarios costaleros por como la llevaban; gracias a Juanma, costalero del Cristo, por acompañarnos en el balcón y poder compartir con él tantos recuerdos de su infancia vividos en esta casa, y como no gracias por la dedicatoria tan bonita que le hizo a mi madre en una cadena de tv que colabora, aludiendo a los hechos acaecidos.

Gracias a los jóvenes que con tanto gusto y empeño adornaron la calle, a la banda, a toda la gente, mucha, que en ese momento nos tenía en el pensamiento, y desde luego a quien no quiero dejar de dar las gracias es a mi madre por haberme transmitido este amor y veneración a la Santísima Virgen y a todo lo del barrio; y como colofón porque sé que no debo extenderme felicitar muy sinceramente a todo los que han participado en la preparación y desarrollo de este evento desde que se iniciara, eludiendo los errores que desde luego siempre los hay.

Mercedes Gutierrez Ruiz

Nota del Humilladero

En éste vídeo, podemos ver la Virgen en la referida Levantá dedicada a mi Madrina, Mercedes Ruiz Gutierrez, (0:09") y en el siguiente transitando par la casa/tienda de la familia, Cerámica Santa Isabel, fundada por mi abuelo, Seabstián Ruiz Jurado, casa natal de mi padre, y cuna de nuestros recuerdos.

Tramo final de la calle en su parte más angosta:

Madrina, Prima, gracias por tanto ...