Noviembre de alegrías y recuerdos.

Cumpliéndose el meridiano del presente mes, traigo a los pies de éste Templete, una página homenaje. En ella no quisiera nombrar a nadie en concreto – por aquello de no caer en el error de un olvido puntual -; cada uno de nosotros sabemos echar en falta a nuestros cercanos y añorados seres queridos. El dolor de la ausencia, la amargura de la lejanía, sabemos convertirla en alegría aquellos que agarrados a la fe, sabemos que El Justo dispuso para ellos un lugar preferente, aguardando la esperada y gloriosa resurrección. No es pues por tanto, un mes triste para SPQHIS, al contrario. Varias celebraciones y aniversarios acontecen en su seno que unido a lo anteriormente expuesto, lo convierten en un mes especial.

En la jornada del 14, tuve por obsequio la sorpresa. Te das cuenta cuando te alejas, de quienes de veras te aprecian, te valoran por ser quien y como eres, aunque realmente los tienes cerca, a veces a tan sólo un clic de ratón. Para vosotros, para todos, mis más sinceras palabras de afecto y agradecimiento. Ansío que el paso del tiempo no deteriore ni produzca fisura en ésta íntima y estrecha relación.

Por otra parte, me congratulo por vivir una maravillosa vuelta a casa. Seis meses alejado del seno familiar produce demasiada añoranza, pero redunda en una incalculable fuerza para abrir los brazos y recibir. Jesulin, se bienvenido a tu casa, a tu hogar, al calor de los tuyos.


A todos los que se fuisteis, dejándonos vuestras enseñanzas, cariño y recuerdo; a todos los que estáis ofreciendo lealtad, sinceridad, amor y amistad (trato de aprender de todos un poco extrayendo lo mejor que ofrecéis) , y al que llega, sabed que siempre estáis presentes en las oraciones, que a los pies del Humilladero de la fe ofrezco Dios nuestro Señor.